Con la llegada del verano y, consecuentemente, con los días mucho más calurosos, encontrar formas de refrescarse es casi un asunto de sobrevivencia. Con las temperaturas elevadas y la sensación térmica aumentando nuestra percepción de calor, refrescarse significa encontrar un oasis en el medio del desierto. Los baños demorados con más frecuencia son una solución que muchos vecinos encuentran para alejar la sensación de calor. ¡Nuestro cuerpo lo agradece, pero el medio ambiente no! Durante el verano, es muy común el aumento del consumo de agua, pero, con algunas actitudes, podemos disminuir el impacto en el medio ambiente y también reducir la factura a finales de mes. Compruebe abajo consejos para ahorrar agua en el baño: Es la hora del baño, ¡qué hora tan feliz y… económica! Nada como un buen baño muy frío para amenizar el calor, ¿verdad? Pues bien, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una…
